17-03-2020
Clase: 1
Prof. Alberto Tello
Contenidos: EL CONOCIMIENTO
Actividades: lee
atentamente el siguiente texto
EL CONOCIMIENTO COMO PROBLEMA.
Los seres
humanos utilizan, para desarrollar su vida y realizar actividades, un conjunto
amplio de conocimientos. Pero este conocimiento debe ser encontrado por medio
de un trabajo indagatorio sobre los objetos que se intenta conocer.
Por ejemplo: si
un profesor nos dice (o leemos en un libro o periódico) que la economía del
país crece a un ritmo del 4% anual, esta afirmación (cierta o falsa) podemos
utilizarla y recordarla, al mismo tiempo que se incorpora y relaciona con otros
conocimientos que poseemos de antemano. Pero resulta evidente que alguien es el
responsable de esa afirmación; alguien, de algún modo, ha estudiado la economía
y ha determinado por algún procedimiento que su crecimiento es de un 4% ¿Cómo
lo ha hecho? ¿De qué recursos se ha valido?
Cuando
comenzamos a preocuparnos del modo
en que se ha adquirido un conocimiento, o cuando intentamos encontrar un
conocimiento nuevo, se nos presentan cuestiones de variada índole, muchas de
las cuales integran el campo de la Metodología.
El conocimiento como proceso.
Desde que la
especie humana comenzó a crear cultura, es decir, a modificar y remodelar el
ambiente que la rodeaba para sobrevivir y desarrollarse, fue necesario también
que comprendiera la naturaleza y las mutaciones de los objetos que constituían
su entorno. Tareas que hoy resultan sencillas, como edificar una vivienda
precaria, domesticar animales o trabajar la tierra, sólo pudieron ser
emprendidas después de cuidadosas observaciones de todo tipo: el ciclo de los
días y las noches, el de las estaciones del año, la reproducción de los
animales y vegetales, el estudio del clima y de las tierras, el conocimiento
elemental de la geografía, etc.
El conocimiento
de esas épocas no se circunscribió exclusivamente al conocimiento instrumental,
aplicable al mejoramiento de las condiciones materiales. Apareció
simultáneamente la inquietud por conocer el sentido general del cosmos y de la
vida y la toma de conciencia del hombre de su propia muerte originaron los
primeros intentos de elaborar explicaciones globales de toda la naturaleza. Así
aparecen la magia, posteriormente las explicaciones religiosas y más tarde los
sistemas filosóficos.
Todas estas
construcciones del intelecto pueden verse como parte de un amplio proceso de
adquisición de conocimientos que muestra lo dificultosa que resulta la
aproximación a la verdad: en la historia del pensamiento nunca ha sucedido que
de pronto alguien haya alcanzado la verdad pura y completa sin antes pasar por
el error.
Esto implica
decir que el conocimiento llega a todos nosotros como un proceso, no como un acto único donde se pasa de una vez de la
ignorancia a la verdad, además de serlo desde el punto de vista histórico.
¿Qué es conocer? Es una relación que se establece entre el
sujeto que conoce y el objeto conocido. En el proceso del conocimiento, el
sujeto se apropia en cierta forma del objeto conocido. Si la apropiación es
física, sensible, por ejemplo, la representación de una onda luminosa, de un
sonido, lo que causa una modificación de un órgano corporal del sujeto
cognoscente, se tiene un conocimiento sensible. Tal tipo de conocimiento se
encuentra tanto en hombres como en animales, si la representación no es
sensible, lo que ocurre con realidades tales como los conceptos, las verdades,
los principios y las leyes, se tiene entonces un conocimiento intelectual
Lo
que hoy llamamos conocimiento científico es un producto relativamente reciente
en la historia de la humanidad, y tiene sus orígenes en otras formas de
conocimiento como el saber cotidiano, la mitología y la filosofía, con los
cuales presenta algunas semejanzas y diferencias.
En
la época de los egipcios, de los griegos y aún en la Edad Media no existía la
ciencia, o por lo menos lo que hoy entendemos habitualmente como conocimiento
científico. Existían, sí, otras formas de conocimiento que de alguna manera son
los antepasados del saber científico, ya que la ciencia no ha surgido de la
nada y ha heredado algunas de sus características, al propio tiempo que ha
incorporado otras nuevas con el fin de aumentar su conocimiento del mundo y la
posibilidad de su transformación, para bien o para mal. La presente nota
intenta hacer un breve rastreo histórico de esas formas de conocimiento
precientífico para, finalmente, describir el sentido actual de lo que hoy
entendemos por ciencia.
El
surgimiento del pensamiento científico en el Renacimiento no significó la
muerte de las formas anteriores del conocimiento, del mismo modo que el nacimiento
de un nieto no significa la muerte del abuelo. Hoy en día se mantiene viva, en
los umbrales del tercer milenio, la gran familia del saber: el bisabuelo (el
saber cotidiano), el abuelo (los mitos y la religión), el padre (la filosofía)
y el hijo (la ciencia) que aún está en pañales y que, como todo bebé en sus
momentos difíciles, suele recurrir a alguno de sus antepasados vivientes.
El conocimiento científico
Luego de un largo trayecto llegamos así al
surgimiento del conocimiento científico, que un poco convencionalmente podemos
situar en la época de la historia llamada comúnmente Renacimiento o Humanismo
(siglos XV y XVI). Un representante de esta nueva forma fue Galileo.
1) El conocimiento científico es racional
y experiencial al mismo tiempo.- Esta característica del saber filosófico de
estar organizado como un sistema jerárquico de enunciados deducibles unos de
otros, y que es lo que aquí designamos racionalidad, y fue algo que el saber
científico heredó de la filosofía. Incluso algunos autores llegan a considerar
esta característica como lo esencial de la ciencia: "Reservamos el término
'ciencia' para el conocimiento general y sistemático, esto es, aquel en el cual
se deducen todas las proposiciones específicas de unos pocos principios generales”.
Galileo sintetiza estas dos características -racional y experiencial- que por
primera vez se dan juntas, en una frase, en 1615, donde cuestiona ciertos
dogmas religiosos y plantea la necesidad de empezar a confiar más en "los
datos de los sentidos y en las demostraciones necesarias". Los datos de
los sentidos tienen que ver con lo experiencial, o las demostraciones
necesarias con lo racional.
Cualquier afirmación científica, para ser
tal, debe estar verificada -o por lo menos ser verificable- empíricamente, pero
además debe estar incluida en un sistema deductivo más amplio donde se
relaciona con otras afirmaciones y donde todas son inferibles a partir de
algunos principios fundamentales. El saber cotidiano no encuentra relación
entre un rayo de luz, un sonido y las ondas que se forman en el agua al tirar
una piedra, mientras que el saber científico los relaciona viéndolos como
diferentes manifestaciones de un mismo principio de propagación ondulatoria.
Del mismo modo, el saber cotidiano puede no encontrar relación entre los
chistes y los sueños, cuando el saber científico los relaciona a partir de un
mismo principio del cual se deducen: la hipótesis del inconsciente. Esto es lo
que queremos afirmar cuando decimos "racional": los diversos
conocimientos no están aislados sino organizados sistemáticamente en función de
ideas más generales.
La filosofía es también racional, pero no
se preocupa por verificar empíricamente sus afirmaciones. La ciencia en cambio,
es un saber experiencial porque intenta siempre someter a prueba sus hipótesis,
por ejemplo mediante un experimento: "la prescripción de que las hipótesis
científicas deben ser capaces de aprobar el examen de la experiencia es una de
las reglas del método científico".
2) El conocimiento científico es especulativo
y práctico al mismo tiempo.- La ciencia no tiene solamente como objetivo
aumentar el conocimiento del mundo por una cuestión de afán de saber, sino que
también se propone sacarle un provecho a ese conocimiento con el fin de poder
predecir los acontecimientos y así dominar la naturaleza. 'Hereda' así el
carácter especulativo de la filosofía, al mismo tiempo que la practicidad del
saber cotidiano: la ciencia es el único tipo de saber que es al mismo tiempo
especulativo y práctico.
3) El conocimiento científico es
explicativo.- Mientras el saber filosófico intenta explicaciones 'últimas', las
explicaciones científicas no tienen tantas pretensiones, aunque tampoco llega
al extremo de contentarse con las 'explicaciones' superficiales del saber
cotidiano, ni menos aún con las mágicas del conocimiento mítico.
El saber cotidiano podría explicar un
ataque de histeria diciendo que alguien la puso nerviosa, o apelando a
explicaciones más tautológicas del tipo "y bueno, la mujer estaba
loca". El saber mítico tal vez invocaría una posesión demoníaca o un
maleficio. En cambio, una explicación científica procuraría explicaciones de
otro tipo, invocando procesos inobservables a partir de una teoría de la
neurosis, como hace el psicoanálisis.
La filosofía, por su parte, considera en
general que no son esos los tipos de problemas que intenta abordar o, si lo
hace, los aborda desde una perspectiva mucha más abstracta y general. Por dar
un ejemplo, un filósofo podría contestar porqué este ataque histérico
simplemente "es", es decir, contestaría desde la teoría general del
ser (o metafísica, tal vez la rama más importante de la filosofía).
Esto es así porque la filosofía intenta
ser un saber sin supuestos, o sea, no da nada por sentado, como hace el
científico. A este último ni se le ocurre preguntarse por el ser o el existir:
parte del supuesto de que las cosas son y existen, y desde allí comienza su
investigación.
4) El conocimiento científico es crítico.-
La ciencia cambia mucho más rápidamente que los dogmas religiosos, porque no
suele aceptar sin más las opiniones prevalecientes y busca ella misma probarlas
con sus propios métodos. Lacan decía que la ciencia es un cementerio de
teorías, donde las nuevas van matando a las anteriores, y la misma obra de
Freud es un ejemplo típico de ello en cuanto está constituida por un número
considerable de rectificaciones de afirmaciones anteriores, que incluso habían
sido planteadas por el mismo creador del psicoanálisis.
A diferencia del saber mítico, que es
cerrado, el conocimiento científico tiende a no considerar que ya está todo
explicado: la ciencia es un saber abierto que deja un interrogante detrás de
cada nueva respuesta encontrada.
El conocimiento cotidiano
Podemos considerar al saber cotidiano como
el más antiguo de todos, y cabe suponer que existe desde los albores de la
humanidad. Algunas veces fue llamado también 'sentido común', y otras 'saber
vulgar' y aún 'saber pre-científico'. No nos gustan estas dos últimas
denominaciones: la primera por su connotación desvalorizadora, y la segunda por
ser excesivamente amplia, ya que hay otras formas de conocimiento, además del
saber cotidiano, que también precedieron cronológicamente a la ciencia, como
los mitos y la filosofía.
Preferimos 'conocimiento cotidiano' porque
hace hincapié en la idea que es un conocimiento que 'usamos todos los días',
más allá de si somos filósofos o peones.
De hecho, es perfectamente concebible que durante todo el día un eminente
científico, luego de investigar concienzudamente la efectividad de una droga que
favorezca la coagulación sanguínea (saber científico), llegue a su casa, se
corte con el cuchillo y se aplique el viejo remedio que su padre le enseñó,
para detener la hemorragia (saber cotidiano).
E. Nagel nos indica acertadamente que
"la adquisición de un conocimiento confiable acerca de muchos aspectos del
mundo ciertamente no comenzó con el advenimiento de la ciencia moderna y el uso consiente de sus métodos.
En realidad muchos hombres, en cada generación, repiten durante sus vidas la
historia de la especie: se las ingenian para asegurarse habilidades y una
información adecuada, sin el beneficio de la educación científica y sin adoptar
premeditadamente modos científicos de proceder”.
Conocimiento cotidiano es por ejemplo
saber que cuando sopla viento del sudeste tendremos tormenta, saber que si uno
pone los dedos en el enchufe se electrocuta, etc.
Para todo ello no necesitamos haber
estudiado ni meteorología, ni física, vale decir, el saber cotidiano no es aun
necesariamente saber científico.
En la vida diaria aprendemos muchas cosas
útiles tanto si vienen del Dr. Socolinsky como si vienen de la abuela, y
solemos poner ambos saberes en un mismo rango de importancia.
Vamos a caracterizar con mayor precisión
este saber cotidiano a partir de cuatro características, tres positivas y una
negativa: es práctico, el dogmático, es experiencial y no es explicativo.
1) El saber cotidiano es práctico.- La
finalidad principal del saber cotidiano es obtener información para producir
algún resultado útil, y poder movernos así en el mundo de todos los días. Sólo
secundariamente puede estar motivado por la simple curiosidad o el afán de
saber por el saber mismo. Conocer qué colectivo conviene tomar para viajar
sentado, o saber cómo se hace un huevo frito no es el resultado de una sed de
conocimiento por el conocimiento en sí, sino una exigencia de la vida diaria.
Por este motivo, el saber cotidiano es
universal, es decir patrimonio de todas las personas, más allá de su grado de
instrucción e incluso de sus predilecciones vocacionales, ya que, por ejemplo,
una persona puede no tener vocación ni interés por el arte culinario, pero si
por las circunstancias de la vida está obligado a cocinar, deberá incorporar
este saber a los efectos de su supervivencia.
En suma, detrás del saber cotidiano
debemos ver no un afán especulativo por conocer sino un afán por dominar
nuestro entorno, por ejercer un poder que nos permite sobrevivir, o al menos
vivir mejor.
2) El saber cotidiano es dogmático.- Un
saber dogmático es un saber que no cuestiona, no se critica, no se discute, y
su lema es "las cosas son así, y punto". Desde ya, cuando decimos que
el saber cotidiano es dogmático estamos queriendo decir que tiene una tendencia
a serlo, que es más fuerte que la tendencia a la rectificación. Dentro de
nuestro conocimiento diario podemos introducir algunas modificaciones,
cuestionar ciertos procedimientos, pero esto no es la regla: una vez que
nuestra madre nos enseñó a hacer un huevo frito de tal manera, o a utilizar
cierto remedio en ciertos casos, tendemos a seguir haciéndolo de la misma
forma, sin cuestionarlo, el resto de nuestros días. Y es natural que ello sea
así, ya que si a cada cosa que aprendemos o que hacemos la cuestionamos y la
criticamos, no nos quedaría tiempo para vivir y nuestra existencia sería un
caos.
3) El saber cotidiano es experiencial.-
¿De dónde nos viene este saber de todos los días? ¿Cómo lo justificamos si
alguien nos pregunta acerca de la legitimidad de nuestro saber diario? Podemos
hablar al respecto de dos fuentes principales: la experiencia propia y la
experiencia ajena. Lo que sabemos de todos los días lo sabemos porque 'yo mismo
lo he comprobado por mis propios medios', o bien porque 'me lo dijo mi papá,
que de eso sabe mucho' (quien a su vez lo sabe porque él mismo lo ha comprobado
por experiencia personal).
El saber ordeñar una vaca es un típico
conocimiento que se enseña y se transmite de generación en generación, pero el
primero que lo adquirió lo hizo por propia experiencia.
4) El saber cotidiano no es explicativo.-
Los paños fríos alivian una herida, cierto botoncito del control remoto anula
el sonido del televisor, etc. Sabemos todo esto pero no nos interesa por qué
ocurre así, es decir, en general, el saber cotidiano no intenta buscar
explicaciones. Desde ya, estamos hablando de explicaciones profundas, no dé
explicaciones superficiales: la explicación superficial de porqué se esponja el
puré remite simplemente a que le hemos puesto polvo leudante, mientras que una
explicación profunda remite a lo inobservable a simple vista, como por ejemplo
invocar cierta supuesta mezcla o combinación química entre ambos productos. El
interés del saber cotidiano se agota a lo sumo en una explicación superficial,
y a veces ni siquiera en ello, sino solamente en el percatarse de una simple
correlación. Es como si pensáramos: "no sé si el polvo leudante es o no la
causa del esponjamiento; simplemente, cada vez que agrego ese polvo, el puré se
esponja".
El saber cotidiano puede confundirse con
el saber científico en otro aspecto: el lenguaje. Muchas personas, luego de
haber leído muchas revistas de interés general afirman que ellas consumen
alimentos con vitamina E para poder destruir los radicales libres y demorar el
envejecimiento prematuro de las membranas celulares, y otras sostienen con
énfasis que las cremas hidratantes mantienen la piel lozana porque la llenan de
agua. Se trata casi siempre de simple palabrerío, e incluso hasta muchas veces
equivocado, porque por ejemplo la crema hidratante no 'llena' de agua la piel,
sino que tapa sus poros evitando que el agua salga al exterior. Además, no es
conocimiento científico porque no está organizado como tal y conectado
lógicamente con otros conocimientos.
Una prueba de ello es que si preguntamos
al que hablaba de la vitamina E qué son los radicales libres, ahí ya no sabrá
qué responder.
Habida cuenta de que el hombre tiene
siempre una tendencia a preguntarse los porqués, el saber cotidiano tiene dos
razones principales para oponerse a esa tendencia y no buscar explicaciones
profundas (o explicaciones propiamente dichas): 1) con o sin explicación, el
saber diario es igualmente efectivo, práctico, útil. ¿Para qué entonces
complicarse la vida buscando explicaciones a todos los pequeños sucesos de la
vida cotidiana? El hecho de conocer la explicación bioquímica de porqué la
aspirina quita el dolor no aumenta la eficacia de la aspirina; 2) la necesidad
de concentrarnos en nuestras actividades cotidianas como peinarnos, estudiar,
trabajar o divertirnos, nos resta oportunidades para satisfacer necesidades
menos acuciantes, como la curiosidad. Esta se despierta en todo caso cuando
estamos frente a fenómenos raros que contradicen nuestra experiencia habitual,
como cuando vemos al prestidigitador hacer un truco de magia, pero normalmente
nuestra curiosidad no llega al extremo de intentar buscar una explicación sobre
el porqué la aspirina es efectiva o sobre el porqué de las mil cosas que
hacemos diariamente. Si nuestro saber diario es efectivo o si no somos
curiosos, no buscaremos explicaciones. Pero sí comenzaremos a buscarlas cuando:
1) nuestro saber empiece a fallar: la aspirina que tomábamos ya no nos cura el
dolor de cabeza, y 2) se nos despierte la curiosidad por averiguar las causas
de todo lo que ocurre. Tal vez ambas situaciones se realimenten entre sí
influyéndose mutuamente: no es algo que intentaremos resolver en estas líneas.
Lo que sí es importante destacar es que fue la impotencia del saber cotidiano y
el afán de satisfacer su curiosidad, lo que impulsó al hombre a trascender el simple
saber diario y buscar nuevas formas de conocimiento, el primero de los cuales
fue el mítico.
El conocimiento mítico
Dentro de este tipo de saber incluimos una
vasta gama de inquietudes humanas, desde las supersticiones hasta las
mitologías y las religiones monoteístas, las que, si bien son diferentes entre
sí en muchos aspectos, comparten no obstante el hecho de constituir una forma
de conocimiento distinta al saber cotidiano, y cuyas características enunciamos
a continuación.
1) El saber mítico es explicativo.- Quizá
los antiguos sabían cómo hacer para matar a ciertos bichos que comían la
cosecha, pero no sabían cómo hacer que llueva para que la cosecha no se
perdiera. El saber cotidiano revela aquí toda su impotencia frente a cuestiones
que están más allá de sus posibilidades reales: no puede recurrir ni a la
experiencia ajena porque sus padres no saben cómo hacer llover, ni a la
experiencia propia porque una vida no le alcanza para descubrir cómo controlar
la lluvia.
El hombre decide entonces inventar una
causa para actuar sobre ella y producir el efecto deseado. Tal vez se pueda
hacer llover si en las noches de luna llena duermo con un sapo muerto debajo de
la cama (solución supersticiosa), o si invoco la clemencia o los favores del
dios de la lluvia (solución religiosa). Como vemos, el hecho de inventar una
causa de la lluvia es ya plantearse una explicación para la misma: llovió
porque dormí con el sapo o porque un dios tuvo clemencia de mi pueblo. No se
trata ya, como vemos, de una explicación superficial sino de una explicación
más profunda, fundada en vínculos de causa-efecto mágicos.
Dotado de esta nueva herramienta
explicativa, y tal vez motivado también por su afán su curiosidad, el hombre se
lanzó a partir de allí a explicaciones más vastas, como dar cuenta de los
orígenes del universo, del hombre o de los animales, naciendo así los diversos
mitos de la humanidad.
2) El saber mítico es práctico.- No
obstante, lo que prevalece en el saber mítico es la finalidad práctica sobre la
especulativa. Cada vez que se necesitaba resolver una situación concreta y el
saber cotidiano nada podía hacer, se recurría a actitudes supersticiosas o
religiosas.
3) El saber mítico es dogmático.- Nada más
dogmático que una creencia supersticiosa o religiosa. El sujeto mantiene su
creencia a pesar de que la realidad objetiva le dice lo contrario.
En efecto, el sapo debajo de la cama no es
la causa de la lluvia, y a pesar de que el campesino duerme con él, no siempre
llueve (esta es la realidad objetiva). Su creencia inconmovible en el sapo hace
entonces que no la abandone e invente entonces explicaciones ad hoc para
justificar el fracaso, como por ejemplo pensar que el ritual no se realizó con
la debida exactitud ni el debido orden en los pasos. Tal vez la complejidad de ciertas
rituales sirva a este propósito de poder encontrar fácilmente explicaciones que
permitan mantener la creencia cuando fracasan los intentos por controlar la
naturaleza.
Acerca del por qué este saber es
dogmático, podría pensarse que es la última oportunidad que el hombre siente
que tiene a su disposición para dominar los acontecimientos del mundo, lo que
lo fuerza a creer en él más allá de toda consideración de la realidad objetiva.
4) El saber mítico es mágico.- El carácter
mágico de este saber reside en el tipo de explicaciones que plantea, es decir,
explicaciones que, no solamente están no están fundadas en los hechos, sino que
además invocan vínculos mágicos de causa-efecto, como lo hemos ya indicado.
El pensamiento mágico implica el
convencimiento de que de cualquier cosa puede salir cualquier otra cosa: así
como de una galera puede salir un conejo. No es lo mismo creer en la magia que
creer en el azar, donde también de cualquier cosa pueda salir cualquier otra
cosa: la diferencia está en que en el pensamiento mágico hay un fatal
determinismo de que de cierta cosa saldrá obligatoriamente otra, mientras que
el azar es todo lo contrario (indeterminismo): de algo no se sabe que saldrá.
En el plan general de la evolución de un
tipo de conocimiento a otros, el saber mítico representa por un lado un
retroceso, porque se pasa de un conocimiento fundado en la experiencia a un
conocimiento mágico, pero por el otro lado representa un avance por ser el
primer saber que se propone dar explicaciones, es decir, responder a un porqué,
ahondar en el conocimiento de la realidad más allá de lo fenoménico y de la
experiencia inmediata.
El conocimiento filosófico
Existe una filosofía occidental y una
filosofía oriental. Lo que aquí consideraremos como comienzo del conocimiento
filosófico tiene relación con la primera, porque la filosofía oriental
representa una transición donde aún el saber filosófico propiamente dicho está
muy impregnado del saber mítico religioso.
Situamos el origen de la filosofía
occidental alrededor del siglo VI AC con los primeros filósofos griegos,
verdaderos pioneros en esto de luchar contra el pensamiento mitológico tan
arraigado en sus mismos congéneres. Este pasaje de una conciencia
mítico-religiosa a una conciencia racional-filosófica se va produciendo
gradualmente: de hecho, el pensamiento de los primeros filósofos griegos -los
presocráticos- está bastante imbuido aún de la mitología, pero poco a poco se
van desprendiendo de ella y, cuando llegamos a la culminación de la filosofía
griega, en Aristóteles, apenas si hallaremos vestigios de esta mitología. La
obra de Platón representaría, a nuestro criterio, una etapa intermedia en este
proceso donde coexisten relatos mitológicos y pensamiento propiamente
filosófico. Es probable que el mismo Platón haya sido bastante escéptico en
cuanto a sus relatos míticos, y quizá los haya utilizado sólo como metáforas
para hacerse entender por un entorno aún muy pegado a la mitología.
Veamos entonces las características de
este saber filosófico occidental, tal como lo conocemos desde los griegos hasta
nuestros días.
1) El conocimiento filosófico es
explicativo.- No cabe duda de que las teorías filosóficas intentan dar
explicaciones del mundo, del hombre, del conocimiento, de la vida y la muerte,
etc. Pero a diferencia de las explicaciones mítico-religiosas, que apelan a
entidades sobrenaturales como los dioses o los demonios, la explicación
filosófica apela bien a entidades naturales (el agua, el aire, la tierra, el
fuego, etc.), bien a entidades abstractas e impersonales (arjé, etc.), con lo
cual se liberan de explicar el fundamento y origen de las cosas a partir de
supuestas entidades antropomórficas que, como los dioses del Olimpo, pueden
decidir sobre el destino de los acontecimientos.
2) El conocimiento filosófico es
racional.- El fundamento del saber puede ser experiencial, mágico o racional.
El saber cotidiano es experiencial porque se funda en un enlace entre hechos
descubierto a través de la experiencia; el saber mítico es mágico porque se
funda en una relación 'mágica', inventada, no empíricamente constatada; el
saber filosófico es racional porque se funda en una relación lógica: los hechos
ocurren de tal o cual manera porque son una consecuencia lógica de ciertos
principios considerados verdaderos (los axiomas, por ejemplo). Esto significa
que la racionalidad del saber la entendemos aquí como la posibilidad de
organizar los conocimientos en un sistema deductivo donde unos de pueden
inferir a partir de otros en forma necesaria. El prototipo de este saber podemos
encontrarlo en la geometría de Euclides o en la metafísica aristotélica.
El conocimiento está así jerarquizado:
unos son más generales que otros, existiendo entre ellos relaciones de
deductibilidad (unos de deducen de otros), de manera tal que un juicio es
verdadero no en virtud de una correspondencia con la realidad (saber
experiencial) sino simplemente porque se infiere deductivamente de otro juicio
considerado verdadero por su simplicidad y su auto evidencia.
3) El conocimiento filosófico es crítico.-
En los últimos 2000 años, la religión cristiana ha variado muy poco en sus
dogmas, mientras que la filosofía ha cambiado mucho porque ha sido capaz de
revisar críticamente sus propias afirmaciones y las de filosofías anteriores. Y
más aún: la época en que la filosofía se ha estancado ha sido precisamente la
época de los 'años oscuros' de la Edad Media, coincidentes con un neto
predominio religioso.
Desde ya que hubieron cismas religiosos, y
no sólo por razones políticas sino también de dogma, pero donde con mayor
fuerza se puede apreciar el carácter crítico del conocimiento es en la
filosofía, que no está tan obligada a soportar el peso de las tradiciones
anteriores. Antes bien, muchas filosofías, por no decir todas, surgieron
oponiéndose a planteos previos, mientras que las religiones no suelen surgir
oponiéndose a otras religiones distintas. Y aún dentro de la evolución de un
mismo filósofo, pueden verse también discontinuidades, como cuando se habla de
un 'primer', de un 'segundo' y de un 'tercer' Husserl. Pero tal vez sea
Descartes el ejemplo más espectacular, cuando decide poner en duda todos los
saberes anteriores y, consecuente con el espíritu de la filosofía, se propone
iniciar desde sus fundamentos y sin supuestos previos, un nuevo conocimiento.
4) El conocimiento filosófico es
especulativo.- Mientras que la principal finalidad del saber cotidiano y del
mítico es obtener conocimiento para dominar y controlar los acontecimientos de
la realidad, la filosofía tiende a considerar el conocimiento como medio para
satisfacer la curiosidad acerca de cómo y porqué el mundo es como es, o para
alcanzar una cierta perfección del alma, con ciertas resonancias platónicas,
más allá de la utilidad inmediata y material que este saber pueda reportar.
Así, el conocimiento deja de ser práctico
y pasa a ser especulativo, tomando esta expresión en el buen sentido: especular
no significa aquí hablar de cualquier pavada, sino reflexionar, pensar,
discutir, criticar, relacionar ideas más allá de las posibles utilidades inmediatas
de estas actividades pensantes, con el fin de alcanzar un sistema coherente de
conocimientos sobre el mundo y el hombre. Los mitos populares suelen recoger
estas características cuando dicen que la filosofía es inútil porque habla de
todo sin hablar de nada en particular.
Lo que mueve a los saberes cotidiano y
mítico es la necesidad (de controlar el mundo), y lo que mueve a la filosofía
es la curiosidad.
Consignemos, por último, que cuando
decimos que la filosofía es especulativa nos referimos a cierta actitud de los
filósofos. Desde otro punto de vista la filosofía es práctica si consideramos
la influencia que pueda tener para la vida cotidiana, más allá de la intención
de los filósofos. Por ejemplo, el ejercicio de la medicina en un país se ve
afectado por la tradición filosófica. Descartes introdujo en Francia el respeto
por el razonamiento y el desprecio por la praxis. Como resultado, el médico
francés se vio siempre más preocupado en estudiar procesos más que resultados,
e ideas más que evidencias. En el otro extremo, los filósofos empiristas
británicos creen que el conocimiento deriva de la experiencia, con lo cual los
médicos de ese país se basan más en la experiencia que en la teoría.
En síntesis, si lo comparamos con el saber
mítico, el conocimiento filosófico deja de ser mágico y comienza a ser
racional, deja de ser dogmático para ser crítico, y empieza a perder
practicidad para adquirir un sesgo especulativo.
A- Realiza un cuadro comparativo entre
los tipos de conocimiento
19/3/2020
Clase: 2
Prof. Alberto Tello
Contenidos: orígenes de la ciencia
Actividades: lee
atentamente el siguiente texto
FILOSOFÍA
DE LA CIENCIA, EPISTEMOLOGÍA, METODOLOGÍA
Muchos autores franceses e ingleses utilizan el
término epistemología para designar a
la "teoría del conocimiento" o "gnoseología", es decir, un
sector de la filosofía que examina el problema del conocimiento en general: el
ordinario, el filosófico, el científico, etc. Pero, en general, el término
epistemología es empleado en un sentido más restringido, referido
exclusivamente a los problemas del conocimiento científico, tales como las
circunstancias históricas, psicológicas y sociológicas que llevan a su obtención y los criterios con los cuales se lo justifica o invalida. La
epistemología es, entonces, el estudio de las condiciones de producción y
validación del conocimiento científico.
La epistemología es una actividad crítica que
se dirige a todo el campo de la ciencia.
No obstante, la
etimología del término "epistemología" es de origen griego. En
Grecia, el tipo de conocimiento llamado episteme
se oponía al conocimiento denominado doxa.
La doxa era el conocimiento vulgar u
ordinario del hombre, no sometido a una rigurosa reflexión crítica. La episteme era el conocimiento reflexivo
elaborado con rigor. De ahí que el término "epistemología" se haya
utilizado con frecuencia como equivalente a "ciencia o teoría del
conocimiento científico". Los autores escolásticos distinguieron la
llamada por ellos "gnoseología", o estudio del conocimiento y del
pensamiento en general, de la epistemología o teoría del modo concreto de
conocimiento llamado científico. Hoy en día, sin embargo, el término
"epistemología" ha ido ampliando su significado y se utiliza como
sinónimo de "teoría del conocimiento"
Estrechamente vinculada con la epistemología,
se halla la filosofía de la ciencia,
que algunos autores identifican con aquella. Sin embargo, no es conveniente
hacerlo así, porque la filosofía de la ciencia, como la filosofía en general,
abarca muchos problemas que no son estrictamente epistemológicos. Un problema
filosófico sería, por ejemplo, tratar de decidir si la realidad objetiva existe
o es una ilusión de los sentidos.
Los presupuestos filosóficos que existen en la
ciencia influirían de un modo esencial en la adopción de éste o aquél método
epistemológico. De manera que el término "filosofía de la ciencia" es
más amplio que el término "epistemología", y ésta sería tal vez una
disciplina independiente de aquella, si bien las conexiones entre ambas y las
presuposiciones epistemológicas constituyen de por sí un asunto de interés
filosófico.
Una tercera palabra, la metodología, suele ser confundida con la epistemología. En general,
el metodólogo no pone en tela de juicio el conocimiento ya obtenido y aceptado
por la comunidad científica. Su problema es la búsqueda de estrategias para
incrementar el conocimiento. Por ejemplo, está fuera de discusión para el
metodólogo la importancia de la estadística, pues ésta constituye un camino
posible para obtener, a partir de datos y muestras, nuevas hipótesis. En
cambio, el epistemólogo podría formularse, a modo de problema, la pregunta por
el pretendido valor atribuido a datos y muestras.
HISTORIA DE LA CIENCIA
Los primeros pasos en la reflexión sobre el
conocimiento, al menos en la cultura occidental, tuvieron lugar en la Antigua
Grecia (S.VII a.C.).El desarrollo del conocimiento filosófico de esa época
abarcaba un amplio campo de temas a investigar. Las preguntas que los
pensadores se hacían comprendían desde preocupaciones sobre cuestiones éticas
hasta preguntas sobre el origen del mundo y por la posibilidad y límites del
conocimiento humano.
Platón (S.VI a.C.) trató de responder a la pregunta de cómo era posible que el ser
humano conociera. Buscaba un conocimiento que fuera universal (válido para todo
tiempo y lugar), absoluto y objetivo. ¿Qué es lo que podemos conocer? Una
primera respuesta podría decir: lo que nos rodea, lo que nos es más cercano, la
realidad. Pero si observamos la realidad nos vamos a dar cuenta de que cambia
todo el tiempo, de que todo los que nos rodea y también nosotros estamos
constantemente en proceso de cambio ¿Podemos estudiar algo que cambia
continuamente? .La respuesta de Platón fue negativa. Para él era imposible
construir un saber sobre lo que nos rodea. ¿Cuál era entonces el objeto de
estudio del conocimiento humano? Platón tenía que buscar una realidad inmutable,
un objeto de estudio que no sufriera variaciones ni a lo largo del tiempo ni en
diferentes lugares. Si lograba encontrar esta otra realidad perfecta tendría
entonces la base para construir un conocimiento válido para todo tiempo y
lugar.
Platón resolvió el problema: como esa realidad
era imposible de encontraren este mundo postuló que había otro: el reino de las
ideas. Este otro mundo era perfecto e inmutable, era el mundo verdadero y real.
Mientras que el mundo que nos rodea no era más que una copia de esa realidad,
un mero reflejo de esa perfección. En tanto copia defectuosa era víctima del
tiempo y la degradación. E filósofo debía estudiar el mundo de las ideas.
Platón propuso la matemática, como ciencia que no se ocupa de entidades físicas
sino de identidades ideales, era el camino el que había que entrenar a los
estudiantes para acostumbrarlos a dirigir su mirada a lo que “no se ve con los ojos del cuerpo
sino con los ojos del intelecto”. Por supuesto, el verdadero conocimiento lo
alcanzaban los filósofos que lograban ir más allá de la matemática y descubrir
ese mundo ideal.
Aristóteles (S.V a. C.) poseía un ingenio
sumamente analítico y propuso una solución que sería aceptada y mantenida por
muchos siglos. Para él había un solo mundo, el que nos rodea, sin embargo
coincidía con su maestro (Platón) en que el conocimiento era posible siempre y
cuando su objeto de estudio permaneciera idéntico a sí mismo. Es decir, que a
pesar de los cambios, algo debía permanecer inalterable. Supuso que en cada objeto
era posible distinguir una forma (es decir, una esencia) y características que
le eran accidentales. Por ejemplo si hablamos de una silla, su forma, su
esencia. A la vez, las sillas pueden ser de madera, de metal, alta, baja, de
distintos colores. Pero estas características son accidentes ya que no
modifican su esencia, no hacen de la silla otra cosa. De esta manera, ya no
necesitamos postular que lo permanente se encontraba en otro mundo como decía
Platón. Los entes concretos individuales de este mundo eran reales y
científicamente cognoscibles. Mientras la esencia permanecía, las
características accidentales podían variar.
1-
¿A què llamamos epistemologìa?
2- Investiga y desarrolla los conceptos de “doxa” y “episteme”.
3- Realiza un cuadro sinóptico sobre las ideas de
ciencia en la antigua Grecia (Aristóteles – Platón)
26/03/2020
Clase 3
1- ¿A qué tipo de conocimiento corresponde las siguientes situaciones?
a- El frio excesivo es causa de los resfríos y estados gripales.
b- El sentido de la vida lo podemos encontrar en los actos diarios.
c- Un gran número de jóvenes elige los medios electrónicos para comunicarse, según una encuesta reciente.
d- El uso de barras de azufre es bueno para los dolores musculares.
e- No creemos en brujas, pero sabemos que existen.
2- Busca dos ejemplos de doxa y dos de episteme.
3- ¿A qué llamamos epistemología?
26/03/2020
Clase 3
1- ¿A qué tipo de conocimiento corresponde las siguientes situaciones?
a- El frio excesivo es causa de los resfríos y estados gripales.
b- El sentido de la vida lo podemos encontrar en los actos diarios.
c- Un gran número de jóvenes elige los medios electrónicos para comunicarse, según una encuesta reciente.
d- El uso de barras de azufre es bueno para los dolores musculares.
e- No creemos en brujas, pero sabemos que existen.
2- Busca dos ejemplos de doxa y dos de episteme.
3- ¿A qué llamamos epistemología?
02-04-20
Clase 4
Contenidos: clasificación de las ciencias
Actividades: Analiza el siguiente texto y responde:
a-
Realiza un cuadro sinóptico a partir de la información
dada.
b-
Dar 2 (dos) ejemplos de cada tipo de ciencia planteada
en el texto.
Las ciencias
Formales y las fácticas
Antes de seguir adelante será
útil recordar una clasificación que hemos visto en años anteriores. Según su
objeto de estudio las ciencias se clasifican como: 1.Ciencias formales: son
aquellas disciplinas cuyo objeto de estudio son los entes formales. Sus
enunciados no hacen referencia directa a ningún objeto de la realidad empírica.
Tienen mecanismos de "comprobación" propios que no necesitan de apoyo
empírico. 2. Ciencias fácticas: son las que, a diferencia de las formales, se
ocupan de los procesos, de los fenómenos y de los hechos de la realidad. Las
ciencias fácticas elaboran conceptos y proposiciones que los explican. La
observación y la experimentación son algunos de los mecanismos de control
utilizados sobre estas afirmaciones que nos permiten establecer su verdad o
falsedad. Las ciencias empíricas o fácticas se pueden dividir, a su vez, en
ciencias naturales y en ciencias sociales. Las ciencias sociales son las que
tienen como objeto de estudio al hombre y a las relaciones de distinto tipo que
los hombres establecen entre sí y con el medio ambiente a lo largo del tiempo.
Las ciencias naturales, en cambio, tienen como objeto de estudio al conjunto de
los fenómenos y de los hechos físicos, los químicos y los biológicos que ocurren
en el universo.
07-04-20
Clase 5
07-04-20
Clase 5
Contenidos: revisión
Actividades: En base a lo visto hasta aquí responde:
a-
Señala 4 características generales que
diferencian a la ciencia de los demás conocimientos.
b-
¿Es lo mismo opinar de algo que fundamentar
sobre algo?
c-
Clasifica las materias que tuviste el año pasado
según la clasificación de las ciencias desarrollada anteriormente.
14-04-20
CLASE 6
Contenidos: Orìgen de las ciencias Sociales.
ACTIVIDAD: lee atentamente el siguiente texto y plantea què tipo de conocimiento se pone en juego.
14-04-20
CLASE 6
Contenidos: Orìgen de las ciencias Sociales.
ACTIVIDAD: lee atentamente el siguiente texto y plantea què tipo de conocimiento se pone en juego.
EL DOGMATISMO DE LA EDAD MEDIA
Durante la Edad Media el
conocimiento aceptado era el que se derivaba de la interpretación oficial de
las Sagradas Escrituras además de los principios generales de la filosofía
aristotélica. Es decir, se aceptaba lo que las 'autoridades' decían o habían
dicho. La Iglesia tenía prácticamente el monopolio del saber, ya que eran los
monasterios los únicos lugares que contaban con bibliotecas y eran los
sacerdotes los que sabían leer y escribir.
En caso de que hubiese
alguna duda o surgiese algún problema sobre cómo interpretar un fenómeno del
mundo real, se realizaban reuniones. En ellas los estudiosos de la Iglesia, ya
sea citando la Biblia, ya sea a Aristóteles, trataban de responder a la
cuestión problemática recurriendo a esas fuentes autorizadas. Se creía que todo
el saber estaba en los textos y en las interpretaciones que los Padres de la
Iglesia habían hecho de ellos. Es en este sentido que se dice que era un saber
dogmático; ya que no admitía cuestionamientos de ningún tipo.
La IRRUPCIÓN DE LA MODERNIDAD
La Edad Moderna comenzó en
el siglo XV. Muchos
historiadores dan como fecha de inicio la del descubrimiento de América (1492).
La modernidad se caracteriza
como una época de grandes cambios. Fue el momento de importantes
descubrimientos geográficos favorecidos por el invento de la brújula y de otros
instrumentos que facilitaron la navegación. La expansión territorial resultante
de esos descubrimientos geográficos dinamizó el comercio y la economía
europeos. La posibilidad de apropiarse de territorios con grandes recursos
naturales y mano de obra que pronto fue esclavizada (la población nativa) dio
lugar a un sistema colonial que perduró por siglos.
El desarrollo económico
social a partir de esos momentos posibilitó la aparición del capitalismo, que
en una primera fase (siglo XV a XVIII) se llamó capitalismo
mercantil y luego capitalismo industrial (siglo XVIII a XX).
16-04-20
CLASE 7
Contenidos: Corrientes epistemológicas: Positivismo
Actividad: Lee atentamente el siguiente
texto. Ahora, imagina que eres un docente que tiene que hacer un cuestionario en
base al texto. ¿Qué preguntas harías?
Durante el siglo XIX se desarrollaron dos grandes
corrientes de pensamiento que tuvieron enorme influencia en el pensamiento
social de ese siglo y del siguiente. Estas corrientes de pensamiento fueron el
positivismo y el marxismo.
La propuesta positivista
Para los positivistas los hechos constituían
lo único 'positivo'. La sociedad se regía por leyes naturales. Esto significa
que, epistemológicamente los positivistas asimilaban la naturaleza con la sociedad.
¿Qué consecuencia tiene esto?
Obviamente si naturaleza y sociedad son objetos
de estudio similares, entonces podemos estudiar la sociedad utilizando los
mismos métodos, técnicas, y el mismo vocabulario que utilizaban las ciencias
naturales para estudiar a la naturaleza.
Esta afirmación metodológica tiene fuertes consecuencias.
Veamos algunas de ellas relacionadas con las leyes que rigen lo social.
En primer lugar, las leyes que explican el funcionamiento
de la sociedad son leyes naturales. Como tales, se las considera universales,
es decir, válidas para todo tiempo y lugar. Pensemos por ejemplo en la ley de
la gravedad: explica la caída de todos los cuerpos, en cualquier momento, en cualquier
lugar. Si las leyes que explican el funcionamiento de la sociedad son naturales
también son universales, es decir, una misma ley se puede aplicar a cualquier
sociedad sin importar el momento histórico que se esté considerando.
En segundo lugar, este modelo explicativo sostiene
la neutralidad valorativa de la ciencia: las leyes universales se establecen independientemente
de la ideología o conjunto de valores que sostenga el investigador que las propone
o utiliza. La ciencia no refleja valores personales (ni sociales), es neutral.
Por último, según los positivistas estas
leyes universales rigen con independencia de la voluntad humana. Afirmar esto
significa sostener que el funcionamiento de una sociedad no depende de las
acciones voluntarias de sus miembros. Y de esta afirmación podemos deducir, en
consecuencia, que los positivistas niegan implícitamente la posibilidad de un
cambio consciente y deseado del orden vigente por quienes lo integran. Así como
no se puede modificar la ley de gravedad no se puede modificar el funcionamiento
ni la organización del entorno social.
Para el positivismo, el orden social estaba dado
naturalmente, es decir, de la misma manera en que estaba dado el orden natural
y el del cosmos. Pero a diferencia de este último, el mundo social del siglo
XIX presentaba conflictos permanentes. ¿Cómo explicaban esta aparente contradicción?
23-04-20
Clase 9
Contenidos: corrientes epistemológicas
Actividad: realiza una comparación entre las posturas positivistas y marxistas. La idea es extraer conceptos centrales y no copiar texto.
21-04-20
CLASE 8
Contenidos: orígenes de las
ciencias sociales: corrientes epistemológicas.
Lee atentamente el siguiente
texto. Seguramente recordaras que estos conceptos fueron desarrollados en otras
materias el año anterior.
MARXISMO:
Mientras el positivismo se
construyó por oposición a las corrientes críticas al capitalismo. El marxismo,
por el contrario, profundizó las teorías revolucionarias. Para Marx, lo que
había caracterizado históricamente a las sociedades humanas era el estar divididas
en clases, esta división dependía del lugar que los individuos ocupaban en el
sistema de producción social. Es decir, dependía de la manera en la que cada
sector se apropiaba de los recursos necesarios para su supervivencia y del
excedente producido por el trabajo social. El conflicto (la lucha y el
enfrentamiento en torno a quiénes y cómo se apropiaban el excedente) era la
característica que acompañaba toda sociedad de clases. Para el positivismo el
conflicto era externo al sistema y aparecía como producto de un mal entendido o
como consecuencia de la ignorancia de las leyes sociales. Para el marxismo, el
conflicto era interno a la sociedad y estaba provocado por su propio desarrollo
y organización. El conflicto solo desaparecería cuando, desapareciera las
clases sociales. Para Marx, ya no se trataba de legitimar el orden existente
por leyes naturales sino que se enfatizaba el carácter histórico, y por lo
tanto transitorio, de toda organización social. El conocimiento científico era,
para Marx, una actividad social y no se podía sostener la neutralidad
valorativa. El científico social pertenecía, como cualquier otro sujeto, a una
clase social, y por lo tanto, compartía con los otros miembros de su clase un
conjunto de creencias, es decir, interpretaciones de la realidad social. En
consecuencia, cualquier explicación que intentara de la realidad social,
retomaría, en algún punto todos estos elementos comunes a los miembros de su
clase. Para Marx el desarrollo de una ciencia estaba condicionado doblemente:
existía un condicionamiento ideológico, de clase y otro histórico, el momento y
grado de desarrollo material de la sociedad en que vive el científico. Estos
dos condicionamientos hacían que ciertos desarrollos teóricos y científicos
solo fueran posibles en determinados momentos históricos y en determinadas
sociedades y no en otros. En consecuencia, resultaba imposible sostener que lo
social estaba determinado por leyes
naturales, universales y ahistóricas. Por el contrario, si existían leyes éstas
regían la organización económica y social (el modo de producción) y el sistema
político vigentes en un período específico.
Estas dos grandes corrientes de
pensamiento, el positivismo y el marxismo, marcaron el ritmo de debate del
siglo XIX. En el seno de ese debate surgieron las disciplinas que hoy conocemos
como ciencias sociales y que resultaron de una especificación y división de lo
social en áreas de estudios independientes. Por ejemplo, la antropología se
desarrolló en la última parte del siglo XIX acompañando la expansión colonial
europea.
23-04-20
Clase 9
Contenidos: corrientes epistemológicas
Actividad: realiza una comparación entre las posturas positivistas y marxistas. La idea es extraer conceptos centrales y no copiar texto.
28-04-20
Clase 10
Contenido:
Corrientes Epistemológicas
Actividad:
Leer atentamente los siguientes textos
El
falsacionismo de Popper
El falsacionismo es el método que Popper propone para las ciencias.
Dice que para que una teoría pueda ser considerada como válida (y no verdadera,
después te explico por qué) tiene que tener la propiedad de ser falseable, es
decir que se pueda demostrar si es falsa o no, mediante un experimento
repetible por cualquier científico.
Por ejemplo, la ley de la gravedad es falsable. ¿Por qué? Porque cada
vez que dejo caer algo al piso la estoy comprobando, el día que algo flote en
vez de caer (si es que eso ocurriera) estaría demostrando que la teoría está
equivocada y por lo tanto es falsa.
Lo que necesita saber es qué tiene que pasar para que esa teoría sea
considerada 'falsa'.
Lo que quería aclararte sobre por qué una teoría que se comprueba en
la realidad él la llama 'válida' y no 'verdadera' es porque al considerar que
toda teoría tiene que ser 'falsable' supone que ninguna teoría es una verdad
absoluta y su validez se renueva día a día pero no eternamente
EL CONCEPTO DE
PARADIGMA DE KUHN
El epistemólogo
Thomas Kuhn (1922-1996) brinda otra postura crítica al falsacionismo
popperiano. Según Kuhn, la teoría de Popper es ahistórica, es decir, no tiene
en cuenta el contexto histórico, económico, político y social en el cual la
ciencia progresa.
Para establecer una
demarcación entre la ciencia y la pseudociencia, y un nexo entre la estructura
interna y el contexto histórico de la ciencia, Kuhn propone el concepto de paradigma. El paradigma es el sistema o
conjunto de supuestos teóricos, leyes, técnicas y valores adoptados por los
miembros de una comunidad científica en un momento histórico determinado. Para
ello, los investigadores científicos tienen que llegar a un acuerdo respecto
de lo que se debe estudiar, cuáles son los problemas por resolver y de qué
manera se los va a solucionar. El paradigma rige el saber científico,
establece los métodos y los límites de lo que es considerado ciencia, y a la
vez, determina formas de pensar, sentir y vivir en toda la sociedad.
Así, la física de
Aristóteles, la astronomía de Tolomeo, la astronomía de Copérnico, la física de
Newton, la electricidad de Franklin sirvieron cada una en su tiempo, a efectos
de definir los problemas y los métodos, las normas y las reglas propias de cada
campo de investigación para generaciones de científicos. Cuando un paradigma
presenta anomalías o fallas en la explicación de la realidad del campo
científico específico en el que funciona, se sucede un período de crisis hasta
que los científicos acuerdan un nuevo paradigma.
No puede comprenderse
la noción de paradigma si no se la
relaciona con el contexto político e ideológico predominante de la época y con
el desarrollo tecnológico. Así, por ejemplo, en el paradigma copernicano de
astronomía, se incluye el material, el instrumental y los telescopios
existentes durante el siglo XVI. A la vez, el paradigma copernicano -que cuestionaba
la autoridad de la Biblia
para explicar los fenómenos naturales- no fue aceptado hasta que la Iglesia perdió parte de
su poder político.
El progreso de la
ciencia -según Kuhn- puede esquematizarse a través de las siguientes etapas:
Pre-ciencia ->~
Ciencia Normal ->- Anomalías ->-Crisis -Revolución -
Nueva Ciencia Normal
(Nuevo Paradigma)
En la Pre-ciencia, se
comienza a estructurar lo que va a constituir el paradigma. Los científicos
tratan de acordar los criterios según los cuales se constituirá la ciencia. Al
formularse el paradigma de la práctica científica, se conforma la ciencia en su
etapa normal. Cuando este paradigma presenta dificultades o anomalías para
explicar la realidad, se produce una crisis. Entonces los científicos deben
intentar acordar nuevamente la serie de problemas, técnica, leyes, y métodos
que constituirán la nueva ciencia. Se deduce un periodo de revolución
científica hasta que se constituye un nuevo paradigma que genera un nuevo tipo
de ciencia. Este paradigma, posteriormente, entrará también en crisis.
30-04-20
Clase 11
Contenidos: Corrientes
epistemológicas
1-
Determina si las siguientes hipótesis son falseables
o no. Justifica en cada caso. En la correcciòn enviarè soluciòn y justificaciòn, traten de pensarlo.
a-Todas las ovejas son blancas.
b-Los metales se dilatan al calentarlos.
c-La masa de un protón es de 1,6726 ×
10–27 kg
D-Es posible que suban las acciones de la
empresa Americana.
2-
Realiza un comentario de la siguiente comparación
aplicando los conceptos de la clase 10:
“Sistemas heliocéntrico y geocéntrico del
mundo. Según el sistema geocéntrico (del griego γῆ: Tierra) del mundo, la
Tierra es inmóvil y constituye el centro del universo; a su alrededor giran el
Sol, la Luna, los planetas y las estrellas, Dicho sistema, basado en
concepciones religiosas), también en las obras de Platón y de Aristóteles,
alcanzó con Tolomeo, sabio griego de la Antigüedad (siglo II de n.e.), su
exposición más completa. Según el sistema heliocéntrico (del griego ἥλιος; Sol)
del mundo, la Tierra, que rota alrededor de su eje, constituye uno de los
planetas que giran en torno al Sol. Algunas ideas en favor de este sistema se
encontraban ya en Aristarco de Samos, Nicolás de Cusa y otros, más el auténtico
creador de la teoría heliocéntrica es Copérnico, quien la elaboró con todo
detalle y la fundamentó matemáticamente. Más tarde, el sistema de Copérnico se
precisó: el Sol no se halla en el centro de todo el universo, sino tan sólo del
sistema solar. Contribuyeron en extraordinaria medida a proporcionar una base
sólida a este sistema, Galileo, Kepler y Newton. La lucha de la ciencia
avanzada por la victoria del sistema heliocéntrico socavó la doctrina de la
Iglesia sobre la Tierra como centro del mundo.
05-05-20
Clase 12
Contenidos: corrientes
epistemológicas.
RESPUESTA DEL PUNTO 1
DE LA CLASE 10.Espero
que hayas intentado solucionarlo. Aquì va la respuesta para que compares con
las tuyas.
1-Todas las ovejas son blancas.
2-Los metales se dilatan al calentarlos.
3-La masa de un protón es de 1,6726 ×
10–27 kg
4-Es posible que suban las acciones de la
empresa Americana.
La primera afirmación es falsable y
además falsa. Es posible encontrar una oveja de un color distinto del blanco
–negro, por ejemplo–. El segundo enunciado también se puede falsar, únicamente
necesitamos encontrar un metal que no se dilate al calentarlo. Desconozco si es
cierto o falso. El tercer enunciado también es falsable, pues se demostraría
como falso si encontramos un protón que tenga una masa diferente; podemos
considerar que este enunciado es cierto. Según el falsacionismo, estos tres
enunciados son científicos. El primero no se utilizará porque se ha demostrado
falso, pero los otros pueden formar parte del cuerpo de una teoría científica
válida hoy en día. La afirmación número 4 no es falsable. Si las acciones
suben, la afirmación es cierta, pero si bajan o se mantienen igual también lo
es. Es imposible encontrar un enunciado simple que la contradiga.
Lee atentamente el siguiente texto.
LA CIENCIA MARTILLO
Para algunos epistemólogos, como los argentinos
Gregorio Klimovsky (1923) y Mario Bunge (1919-2020), debe distinguirse la
ciencia como expresión del conocimiento y la racionalidad del hombre de su
buen o mal uso por parte de las instituciones, gobiernos y políticos. Para
estos pensadores, los científicos no son responsables del uso que el poder
político-económico haga de las teorías científicas fuera de sus laboratorios.
La ciencia es como un martillo que, a veces, se usa para clavar un clavo y
otras, para aplastar la cabeza de una persona. Para Bunge, todo avance científico es beneficioso, y
la ciencia es neutra. Sin embargo, hay productos tecnológicos, como la
ametralladora, que solo sirven para matar. Mientras que con explosivos también
se pueden abrir túneles, la instrumentalización inadecuada de la ciencia es
responsabilidad de los políticos. La solución, para Bunge, es una
"ideología científica" que, con la ayuda de la mejor ciencia, organice
los proyectos más convenientes para la sociedad.
Según Klimovsky, ti deber ético del científico es
interesarse no solo por las implicaciones sociales y humanas de lo que hace y
señala por lo que perjudica a la sociedad sino también, por las soluciones
posibles y convenientes que los políticos deberían implementar. El científico
no debe venderse a quien más le pague sin considerar las circunstancias éticas,
sino, por el contrario, debe desarrollar sus conocimientos al servicio de la
justicia y de la paz.
CRITICA A LA
CIENCIA MARTILLO :
El filósofo argentino Enrique Mari (1927-2001) es uno de los principales
opositores a la distinción entre producción científica y el mal uso o errónea
aplicación de los conocimientos científicos por parte de los gobiernos, los
Estados o las grandes empresas. Esta distinción, sostiene Mari, no tiene en
cuenta las peculiaridades que asumió la producción científica en el siglo XX. Este siglo ha visto proliferar una serie de teorías
científicas que son en sí mismas mortíferas, es decir, que emplean recursos
lógico-metodológicos para generar la destrucción del hombre y de la naturaleza.
Son teorías destructivas en sí, que salen de la labor de científicos y de
técnicos que trabajan al servicio de Estados militar-industriales,
laboratorios o instituciones. Un ejemplo dado por Mari es el de la bomba
neutrónica. No hay, en este caso, buen o mal uso dependiente de la política,
sino una teoría mortífera que genera una bomba que destruye a los seres vivos y
deja intactas las cosas materiales, como edificios e instalaciones. Entre la
teoría sobre la fisión del átomo y la creación de la bomba neutrónica, existe
un trabajo científico con una finalidad específica. Así también, entre las teorías de los físicos sobre
la energía nuclear y la producción de los distintos modelos de bombas atómicas,
hay un tramo de tecnologías, teorías científicas y experimentos que
complementan la teoría nuclear inicial, que son responsabilidad del científico.
Para Mari, ningún científico puede afirmar que "mi tarea es proporcionar
conocimiento y el uso que se haga del conocimiento no es de mi responsabilidad".
07-05-20
Clase 13
Contenidos:
Revisión de conceptos
Actividad:
1- Establece
si las siguientes afirmaciones son Verdaderas o Falsas. Para ser honesto no hay
afirmaciones que tengan esas características. Serán V o F según cómo justifiques las afirmaciones.
Aprecio que lo intentes es un buen ejercicio de comprensión.
a-
La ciencia es neutra, no es ni buena ni mala.
b-
El momento histórico determina las cosas que se
investigan, por ejemplo: en la actualidad los esfuerzos científicos están puestos
en el coronavirus. El grupo científico que lo logre generará mucho dinero.
c-
La ideología influye en el pensamiento de un científico.
No es lo mismo un científico que busca la cura del dengue, que afecta a países pobres,
de aquellos científicos que desarrollan nuevos tratamientos para evitar las
arrugas.
d-
El uso de los avances científicos no tienen que
ver con los ellos, por ejemplo el uso indebido de drogas.
12-05-20
Clase 14
Contenido: Introducción al conocimiento científico
Actividad: Mira el siguiente video y explica cuáles son los
pasos que se plantean.
14-05-20
Clase 15
Contenido: método científico
Actividad: A continuación verás los 5 pasos
del método científico y sus definiciones. El problema es que están
desordenados; según tu criterio y las definiciones cuál es el orden correcto.
Existen siempre cinco etapas o pasos
del método científico:
Hipótesis. La etapa de formulación de una hipótesis: tomando todas esas preguntas
que surgieron tras la observación, uno puede plantear una idea que explica de
modo general lo observado.
Experimentación. La de la experimentación: a través de uno o
varios experimentos cuidadosamente pensados uno trata de poner a prueba la
hipótesis planteada.
Observación. La de la
observación, se debe estar atento al mundo para reparar en algo puntual.
Conclusiones. Se analizan los
resultados de los experimentos y se saca la conclusión, es decir, es el momento
en el que el científico se da cuenta de que lo que “conjeturó” o “hipotético”
era verdadero o bien falso. Algunos agregan a estos pasos básicos uno más: el
de la comunicación del conocimiento generado.
Preguntas. La de formulación de preguntas acerca de lo observado.
CARACTERÍTICAS DEL MÉTODO CIENTÍFICO
·
Es fáctico. Se basa en observación e información. El método
científico se nutre de datos concretos, es decir, de medidas; estas pueden ser
cualitativas o cuantitativas, pero siempre existen.
·
Exige verificabilidad empírico. Un conocimiento adquiere el
carácter de científico cuando pudo ser contrastado o verificado, es decir,
superó la prueba de confrontación con la realidad.
·
Es objetivo. A través del método científico se aspira a
generar conocimientos sobre la base de hechos concretos, sin tomar en
cuenta valores o
creencias del propio investigador o instaladas en la comunidad.
·
Es riguroso y de orden lógico. No se trabaja de cualquier
manera en el método científico, no se pueden omitir pasos, tampoco alterar el
orden lógico, ya que no se arribaría a ninguna conclusión válida en ese caso.
·
Exige experimentación controlada y sistemática. Plantea la
etapa de experimentación de manera muy cuidadosa, tratando de que esta resulta
reproducible y de que ningún factor se convierta en una amenaza para la robustez
del experimento, aun cuando se acepta que existe siempre el denominado error
experimental.
·
Apela al razonamiento deductivo o inferencia. Una vez
formulada la hipótesis, se infieren de ella algunas posibles consecuencias
prácticas, que luego son sometidas a verificación. Es necesario poder
establecer con claridad estas inferencias.
·
Recurre al razonamiento inductivo. A veces es útil la
observación de fenómenos particulares, con la intención de arribar a premisas
generalizadoras. Sin embargo esto no se considera suficiente para avanzar en el
conocimiento.
· Exige permanente análisis y síntesis. Mediante
el análisis se identifican cada una de las partes que integran una realidad; a
través de la síntesis todas las partes identificadas se integran en un todo más
abarcador, que contribuye al entendimiento de un fenómeno.
Nueva entrega de tareas. Las tareas de las
clases 9 y 13, pueden ser entregadas hasta el jueves 21 mayo en la plataforma “classroom” (código: o72ks3z).
MUY
IMPORTANTE: A partir del LUNES 18 DE
MAYO las clases aparecerán SÒLO en la plataforma “classroom” NO en el blog de
la escuela. En dicho blog seguirán estando las clases anteriores. Gracias